Descubra el error en la foto

Esta época del año se presta para menzajes de paz y de buenos deseos.

¡Qué bueno es que, al menos una vez cada tanto, haya incentivos para amar y hacer el bien! Lástima que estos mensajes sean en realidad campañas publicitarias destinadas a un mayor consumo (de los que pueden, por supuesto).
En la televisión comienza una seguidilla de películas navideñas en las que la Navidad se expresa en un "espíritu navideño", papá noel (variantes: Santa, Santa Claus, San Nicolás), el Grinch, paz, amor, alegría, buena voluntad, etc., etc.
Pero, ¿qué hay del origen de la navidad? ¿Por qué se celebra? Te propongo un juego: Pensá bien, concentrate, mirá con lupa, buscá en diccionarios.

¿Cuál es el error de la foto?




Si descubriste el error ¡Felicitaciones!
Fuera de broma, parece que hoy es necesario redescubrir el significado de esta fecha tan querida para nuestra cultura. Ya está asimilada a la época del año en que nos saludamos con un "felices fiestas", sí las dos. Son dos encuentros equivalentes para hacer lo mismo, incluso el brindis y los cohetes de las doce de la noche. Dos encuentros tan iguales que son casi intercambiables salvo por el tema de los regalos en el arbolito.

Volviendo al tema de la foto, el origen de la navidad es muy humilde. Tiene que ver con un nacimiento en una familia de obreros en un zona pobre del mundo de ese entonces. Este nacimiento no se transmitió por la televisión ("en el diario no hablaban de ti"), y sin embargo era el acercamiento mayor que Dios quiso tener con los hombres. Un acontecimiento único en la historia.

Dios quiso padecer hambre, cansancio, disfrutar de fiestas, de amigos; sentir tristezas, alegrías, decepciones y esperanzas; vivir lealtades y traiciones.

Con todo esto, se convirtió en un Dios que sabe en carne propia lo que vivimos, lo que nos pasa. Se convierte en un Dios tan cercano que también es de carne y hueso como vos y yo. Nadie se esperaba un acto de amor tan grande.
No dejes que pase este 24 sin hacer referencia o memoria de este hecho. Tal vez, a alguno se le ocurra que recordar es algo poco festivo, pero es que esto es lo que pasó y la razón de que podamos alegrarnos en que hay esperanza para quien busca respuestas, perdón para quien se siente responsable de sus errores, vida para quien se ve ya sin fuerzas.
Que no pase la oportunidad de que te encuentres con el Dios que con los brazos abiertos dio su vida por vos y por mí que dijo: "quien a mí viene yo no lo hecho fuera"
Un abrazo.

Escritores de hoy

Tengo la alegría de anunciar en este espacio que mi querido amigo Jorge Hermida fue seleccionado en un concurso de la editorial "De los cuatro vientos" para publicar algunos de sus escritos en una antología que edita la casa mencionada.

Felicitaciones querido Jorge.

El libro ya ha salido a recorrer librerías para que todo amante de la lectura pueda conocer a quienes escriben en la Argentina de Hoy, y no están consagrados (todavía).

En esta oportunidad publicamos aquí un cuentito de Jorge (que no está en el libro) para que lo vayas conociendo.


El Aniceto


-¿Quién levanta este muerto?, pregunta el Aniceto, golpeando el bar, viendo que se levantaban los parroquianos para irse.
Encara al grupo y se abalanza sobre uno de ellos quien al darse vuelta, dejó ver que en su cara estrecha lucía una afilada nariz con la que parecía picarle a uno y que sus ojos grises habrían podido horadar una piedra sin inmutarse. Luego de la sorpresa, el Aniceto retira su mano del fulano en cuestión y le recuerda que debe abonar la cuenta. El fulano le arroja un billete sobre la mesa y se retira sin mirarlo.
Luego de hacer la caja y cerrar el boliche, se retira a su casa sin advertir que una sombra seguía sus pasos. Al llegar a la puerta de su casa, lo sobresalta un mal presentimiento y gira su cabeza. Al no ver a nadie, decide entrar y cuando está por hacerlo, una mano fuerte se interpone y lo empuja hacia el interior.
-¿Quién sos?, llega a preguntar antes rodar por el suelo y perder el conocimiento.
Una luz muy fuerte golpea sobre sus ojos y trata de taparla con sus manos, pero está atado de pies y manos.
Está solo y asustado.
De pronto el ruido de la llave lo sobresaltó.
Reconoce al fulano, quien se dirige a la mesa y vacía una botella de vino barato en su garganta para luego, con el último trago, escupirle la cara y, sin mediar palabra alguna, arroja un billete gastado sobre la mesa y luego lo libera.
Al salir de la casa le dirige la última mirada al Aniceto quien temblando de miedo alcanza a adivinar un dejo de desprecio en la voz del fulano: - “Quizás la próxima vez me trates mejor…”.
La puerta se cierra quejándose una vez más por la falta de grasa y el Aniceto con esperanza y vencido por el cansancio se quedó dormido sobre el piso.

Jorge Hermida


Ya tenemos en este blog otro cuento de Jorge Hermida que puede leerse en http://noesunapipa.blogspot.com/2008/05/el-potrerito.html




Para ir al cine

Sabemos que nuestra identidad se forma por la diferencia. Yo soy lo que no son todos los demás. Eso me hace ser quien creo que soy. Pero, por otra parte, no somos sin los demás, sin aquél con quien me confronto, con quien me comparo, con quien comparto esta pequeña porción del tiempo y del espacio que es mi vida.
Pero, por calamidades de la naturaleza humana, tendemos a despreciar a algunos otros y ejercer todo tipo de violencia sobre ellos, sin darnos cuenta que esos "otros" son parte de mí mismo.
En orden a estas ideas quiero compartir el lanzamiento de una película que habla de mí y de los demás, de vos y de los demás.
Un querido amigo participó en la creación de este film y me animo a usar este diminuto espacio para que otros sepan. El jueves 27 de Noviembre se estrena en el Complejo Tita Merello NOS OTROS, un film documental que habla en profundidad sobre la discriminación en Argentina.
Se puede ver el trailer completo y mejor en http://www.nos-otros.com.ar/trailer.html
Toda la información de la peli se puede encontrar en www.nos-otros.com.ar
Saludamos a los realizadores y a quienes nos hacen pensar en temas que son realmente importantes.

Muestra de fotografía

Queridos amigos:
Quería compartir, no sin un pequeño dejo de orgullo, las fotos que mis alumnos realizaron para sus trabajos prácticos. Va a aparecer en dos o tres entregas.
Se trata del trabajo que realiza 3° año en la materia de Medios Audiovisuales para poner en práctica sus conocimientos de composición de imagen. En otro momento podrán ver algunas de los trabajos de 5° Periodismo para para la unidad "Fotoperiodismo".
Para poder ver la primera tanda de fotos, por favor hacer clic aquí. Espero que les guste. Muchas de ellas fueron seleccionadas para una muestra que se realizó en el colegio con una gran cantidad de elogios para los chicos de sus compañeros y de colegas profesores.
Un abrazo.

Perspectiva

Desde muy cerca se puede ver a un hombre parado más o menos, sobre sus pies en la tierra. No es muy grande y no le gusta que le digan "pequeño". Siempre aspira llegar un poco más alto, aunque instintivamente conoce sus limitaciones. Generalmente le llega un momento en la vida en que piensa en trascender, en dejar algo, consciente de su corta vida y del rápido decurso del tiempo.


Si te alejás, ves que ese hombre está en compañía de otros. No está solo, aunque por momentos se siente que no tiene a nadie. Toda su vida consiste en definir quién es en relación con los demás. Construye una identidad con mayor o menor éxito y se alegra o se ufana de "ser alguien".
Algunos son concientes de que el otro está cerca. Puede vivir con el corazón hacia el otro o con el centro de atención fijo en el ombligo. Cada actitud resultará en una persona que deja huellas en quienes tienen contacto con él o en un mal recuerdo para quienes deban soportarlo.

Tomando un poco de distancia, digamos un vuelo de águila, apenas podemos detectar la existencia de este hombre. No podemos distinguirlo con claridad y a nuestros ojos se pierden sus rasgos distintivos, se vuelve insignificante. Es decir, desde este punto solo forma parte de una textura visual y ya no tiene importancia como individuo. No podemos ver su rostro, sus preocupaciones, ni escuchar sus clamores por amor, reconocimiento, dignidad o justicia. Porque así de pequeño es.

Podés volar más lejos, a la luna por ejemplo, y ya desde allí no nos percatamos de la presencia de este hombre o mujer, ni de nadie. Si no nos cuentan de la existencia de los hombres y las mujeres en ese planeta, podríamos pasar de largo de ellos como si nada. Su lenguaje, sus sentimientos, sus guerras, sus caprichos y suceptibilidades no tienen entidad alguna para el observador.

Es posible viajar mucho más lejos, aunque sea en nuestra imaginación.Un ojo puesto en el borde de nuestra galaxia, no podría ni distinguir el destello de nuestro sol, siquiera como un puntito brillante, desdeñable, comparado con los gigantes que pueblan el espacio. La inmensidad celeste nos hace estremecer en nuestro interior por su grandeza. Desde aquí, del hombre, ni noticia.


Las galaxias hermosas enjambradas se nos muestran como nubes cuyas formas nos fascinan... Pero, ni rastro de los hombres y las mujeres sobre sus pies. Nuestra existencia no tiene ningún interés o consecuencia para el universo vasto y maravilloso. Nuestra ausencia no produce ninguna inquietud.

Pero, allí, sosteniendo el universo entre las palmas de las manos, nuestro Dios nos observa, nos anhela, nos extraña. Se acongoja por la soledad, la tristeza, la desorientación de muchos. Se enoja por la avaricia, la altanería y la injusticia de otros. Se llena de ira por la corrupción, el desprecio y la desvergüenza de los que se creen grandes.




Y decidió tomar cartas en el asunto. Él acortó la distancia sideral que había con nosotros y se hizo uno de los hombres, con los pies en la tierra, sin altanería, con un corazón humilde enseñando que el más grande es el que lava los pies de su prójimo. Para que ese hombre y esa mujer sepan que no están solos y que el creador de todas las cosas es capaz de todo lo posible por acercarse y amarlos. Aunque le cueste la vida.

Darío

Día del niño

La niñez se festeja en este mes de agosto. Creo que todos tenemos el recuerdo del anhelo de este día en el que recibiríamos nuestros regalitos por ser nuestro día, o porque "siempre llevaremos un niño dentro". Luego nos encontraremos con otros chicos para contarnos (¿tal vez, para competir?) lo que nos regalaron.

Esta idea de celebrar un día del niño comenzó hace más de 50 años. El 20 de noviembre de 1952, la Asamblea General de las Naciones Unidas se reunió con la idea de reafirmar los derechos universales del niño, y para que se celebrara en cada país del mundo, que se consagraría a la fraternidad y a la comprensión entre los niños del mundo entero y se destinaría a actividades que desarrollaran el bienestar de los niños del mundo. ¡Qué lindo suena! No vemos que haya habido muchos progresos en este tema.


Lugares comunes

Me gustaría caer en el lugar común de que todos los días son el día del niño. Pero no puedo. Todas las semanas me toca ver a niños que se las rebuscan para tener lo que necesitan para subsistir. Niños con sus hermanitos colgados del cuello que buscan dónde hallar una moneda o que llegan de la manito a algún comedor que les brinde una merienda.

Me gustaría caer en el lugar común de que este día es una celebración al consumismo. Pero no puedo. Me sigue dando cosa (bronca) la parafernalia publicitaria llamando a los deseos de quienes pueden consumir, y dejando a los demás con la "ñata contra el vidrio", consolándose con regalos simbólicos. Los niños no son tontos. Saben perfectamente que la alegría que ven en la pantalla del televisor no se reemplaza con la buena intención de padres que no llegan a fin de mes. Se desgarran los corazones con los bienes multicolores que se ofrecen y, a la vez, se les niega.

Me gustaría caer en el lugar común de que los niños, primero. Pero no puedo. No entiendo que los sectores de poder discutan entre sí por políticas monetarias o aduaneras, afectando los precios de los alimentos que necesitan los niños y los grandes. Un cuarto de los niños argentinos están por debajo de la línea de la porbreza, y lo seguirán estando mientras que los que fijan los precios y los salarios lo hacen según sus intereses mezquinos.

Me gustaría caer en el lugar común de que la culpa es sólo de los sectores de poder. Pero no puedo. Nos preguntamos cómo es que los niños llegan a los niveles consumismo en que piden, piden, piden y nada les conforma. Cómo protagonizan hechos de violencia como los que se pueden ver en las escuelas (y a veces en la televisión). No nacen de la nada. Fijate este video.

Esperanzas

Este panorama es bastante negativo y lejano al espíritu de esta celebración, es verdad. ¿Hay esperanza para los niños? La respuesta es sí. Sí, si hacemos nosotros lo necesario.

No es de esperar que una persona enferma de violencia (como algunos casos que vimos en la propaganda) cambie por la presencia de un chico, pero es posible que tomemos conciencia de los valores que transmitimos con nuestras acciones, que la falta de solidaridad sea cambiada por actos que enseñen por el ejemplo. Es cierto que los adultos estamos metidos en el sistema y no lo cuestionamos. Es hora de que sí lo cuestionemos y pongamos en nuestra agenda de conversación cotidiana en los lugares en los que nos encontremos (trabajos, escuelas, iglesias, clubes, etc.), aunque en principio algunos se opongan porque son temas de "mala onda". No nos sumemos al consumismo en el que nuestro sistema capitalista nos ha hecho nacer y abramos nuestros ojos a otras realidades que están a una mirada de distancia, no más. Podemos aprovechar esta fecha para regalar algo más duradero que el último chiche electrónico o la zanahoria que tienen siempre delante de su vista en las pantallas publicitarias.

Se puede sembrar la alternativa de una vida más solidaria, compartiendo tiempo, charlas, actividades con ellos. Si enseñamos cuando son tiernitos, los valores se injertan de manera de manera tal, que duran toda la vida.

Darío

Día de la Independencia

Saludos en este día de la Independencia.
Disfrutemos de este feriado también pensando en que los de 1816 estaban en un momento de inflexión en la historia. Hoy, la crisis política y económica nos pone también en una encrucijada en la que se definen muchos destinos de nuestra historia como país. Ojalá sepamos aprovechar la oportunidad y que nuestros gobernantes piensen en un futuro colectivo y no en sus patrimonios al momento de dictar leyes. Que la crisis sea un escalón para crecer.

Hace mucho que no actualiza el blog, pero pronto me voy a poner al día.

Darío

No juegues con la comida

Desde chiquitos pudimos haber recibido esta reprimenda por darle vueltas a un plato de alguna “exquisitez” que no lográbamos tragar. Es verdad, la comida estaba ahí porque es buena para nosotros y porque mamá, la abuela o alguien la había preparado con esfuerzo y amor.
Es así, la comida no es algo para jugar. Es lo que nos garantiza a nosotros y a nuestros hijos un buen crecimiento y desarrollo de las habilidades de nuestro cuerpo y mente. La salud sembrada a tiempo dará su fruto durante el transcurso de nuestra vida.
Hoy parece que hay gente que no ha asimilado esta enseñanza ancestral. Con la mira puesta en otros intereses hacen de la comida el instrumento de un juego perverso.

Los alimentos se han convertido en uno de los temas más importantes en el juego de la política y la economía internacional. Es decir, siempre fue importante, pero hoy tiene más relevancia y una nueva vigencia a causa de los desarrollos tecnológicos recientes. Las grandes multinacionales tienen sus garras puestas en este negocio trasnacional que genera y generará fabulosos ingresos a sus arcas. Los cereales transgénicos (esto es, modificados genéticamente) son la base de la agricultura moderna, que tiene en Argentina no de sus mayores exponentes gracias a sus condiciones de fertilidad fabulosas, desde hace mucho conocidas. No importa que los campos se degeneren por el monocultivo sojero porque se vive como si el suelo fuera a producir para siempre o porque hay una mirada miope obnubilada por ganancias rápidas. Lo que no muchos saben es que el grano transgénico que se utiliza para sembrar es de unas pocas multinacionales como Monsanto, que acaparan todo el mercado nacional y que se llevan gran parte del negocio. La comida no es un juego
Tenemos también el tema de los biocombustibles, cuya aparición trae aparejada la necesidad de más grano para su producción. Como consecuencia se disminuye la parte de la cosecha destinada a alimentación para trasladarla a las plantas de biodiesel o similares. Y bien sabemos que a mayor demanda de un producto, mayor precio. Y nos referimos al precio de los alimentos. No hay que jugar con la comida.

El incremento de los precios que vemos cada día en el almacén y el supermercado sólo refleja un aspecto de un fenómeno internacional en el que los aumentos de la comida para las poblaciones más pobres es causa de crisis civiles, hambrunas, revueltas, etc.

Comida para una semana, campo de refugiados, Chad (Foto: Peter Menzel)

Ya no se trata de saber quién pasa hambre ni quién morirá de hambre en el futuro, sino más bien de saber quién llegará el primero a la fase de la locura a fuerza de no tener nada qué comer.
La locura ya está en las calles africanas, asiáticas y latinoamericanas; y si Europa se alarma, es simplemente debido a los ejércitos de clandestinos que surcan las calles de las ciudades europeas, llevados por los suyos a través de carreteras y mares en primer lugar, y después por las policías del mundo libre por haber invadido un terreno que no soporta sus olores ni sus colores.

Nuevamente vemos que como en todo espacio en el que la riqueza y el poder son los protagonistas, unos pocos concentran la mayor parte dejando afuera con lo que sobra a la gran mayoría. Surgen algunas preguntas:
¿Por qué en el conflicto agrario de nuestro país se encuentran juntos la Sociedad Rural Argentina y los pequeños y medianos productores? Leer un poquito de nuestra historia nos recordará quiénes son las familias de la Sociedad Rurales y cómo manejaron los hilos políticos (y militares) de nuestro país en aras de sus intereses.



¿Por qué nuestro gobierno engloba en el frente opositor a todos los grupos y no divide entre los pocos que tienen la mayor parte del sector agrícola y ganadero y el resto?

¿Por qué si tenían tan claros los números, quién era cada quién, cuánto producía cada uno, qué extensiones de campo poseía, lo que producía, etc.; cuando impusieron las retenciones lo hicieron tan indiscriminadamente?

¿Por qué la extraordinaria renta financiera y de capitales sigue exenta de impuestos?

El tema de la concentración sique presente. A nivel nacional están en juego los intereses de unos pocos, como a nivel internacional los temas del alimento y el hambre es manejado por un puñado de países superpoderosos.

Comida para una semana, familia alemana tipo (Foto: Peter Menzel)

¡Qué paradojico vivir en tierra de abundancia y tener que tratar el tema de la comida! No es lógico que nuestra comida tenga precio internacional, o precio antojadizo, o precio temporada, o precio escacez. No es lógico que tengamos personas con problemas de desnutrición en una región en la que se pueden dar el lujo de derramar miles de litros de leche por las rutas cortadas.

No es lógico que un mundo que produce tres veces los alimentos que necesita toda su población tenga a la mitad de sus habitantes con alimentación deficiente y que cada 10 segundos mueran 3 hambrientos. Dios va a pedir cuenta por las imágenes que conocemos de nenes con pancitas hinchads y de mamás con manos de ramita y sin mirada que esperan..., no saben qué pero esperan. Para ellos la comida no es juego.
Un presidente citó a Jesús (con desfachatez) cuando dijo que a los pobres siempre los tendremos entre nosotros. Lo que no dijo, en su ya legendaria ignorancia, es que Jesús citaba una antigua ley hebrea que en su versión completa decía así: "Gente pobre en esta tierra, siempre la habrá; por eso te ordeno que seas generoso con tus hermanos hebreos y con los pobres y necesitados de tu tierra." (Deuteronomio 15:11).
Pensar así ¿será una utopía? Bueno, puede ser... Pero el realismo no nos está trayendo muchas soluciones, mi amigo. Tenemos mecanismos de expresión que debemos comenzar a usar y decirles a los que pueden manejar el poder: "no juegues con la comida, porque no tenés derecho, porque es un don de Dios, porque no te corresponde enriquecerte a costillas de la vida y la muerte de tu prójimo"








De la Revolución de Mayo


“El pueblo quiere saber de qué se trata” es la consigna que la tradición nos marca como lo que buscaban los revolucionarios de 1810. No sabemos si la frase realmente existió en esa época, y sabemos que “el pueblo” significaba solamente una porción muy pequeña de la población de una ciudad formada por gente de muy diferente condición social y cultural.

Pero de todas maneras, saber de qué se trata es entender de donde surgen las decisiones de los poderosos que al final de cuentas nos afectan a todos. En épocas en las que unos pocos planeaban a su conveniencia el destino de un territorio y de la población, ésta permanecía ajena a la información y era privada de la posibilidad de opinar al respecto. Los monarcas manejaban los hilos del mundo beneficiando el patrimonio de muy pocos poderosos.

Pero la lucha comenzaba. Con muchas diferencias entre ellos, los revolucionarios de mayo buscaron ser los forjadores de sus propios destinos y los autores de sus propias decisiones. Estas ideas fueron llevadas al resto de las provincias para poder constituir un orden local que fuera fuerte para resistir el poder real español. Algunos querían el control para pequeños intereses personales, pero otros soñaban también con la plantación de una nación libre, justa y soberana. Incluso fueron capaces de dar sus vidas por esta causa.
Primero se obligó al virrey español a renunciar a su cargo. Luego comenzó la lucha armada para llegar a todos los rincones del antiguo virreinato.

Saber de qué se trata es dejar de estar al margen, saber de qué se trata es luchar por un ideal que se quiere alcanzar entre todos. Saber de qué se trata es jugarse por un proyecto y la esperanza de un proyecto que es posible realizar. Sabemos que de la mano de Dios podemos llegar a transformar el sistema en el que estamos metidos, buscando la justicia y la paz. Y bien sabemos que si primero no hay justicia, nunca habrá paz.

Pero, no se puede saber de qué se trata quedándonos sentados esperando que nos traigan soluciones, desperdiciando nuestro tiempo y nuestras vidas y olvidando que cuando no estudiamos, cuando no trabajamos, cuando no nos esforzamos le estamos dando a otros la capacidad de decidir por nosotros y así estar, otra vez, sometidos a la autoridad de algún poderoso.
Porque es vedad que las ideas de la revolución no surgieron de en medio de la ignorancia y la vagancia, sino de hombres que se pusieron a estudiar y leyeron los pensamientos más libertarios de su época. En sus épocas de estudiantes, hombres como Belgrano y Moreno conocieron los textos de pensadores como Rousseau, que cambiaría su modo de ver el mundo para siempre. Pudieron entender así “de qué se trata” .

El sistema siempre te ofrece opciones para la ignorancia y la dejadez, es más fácil manejar al que nada sabe. Pero es tiempo que vos no le hagas el juego a los poderosos, que tomes la posta que nos dejan los hombres de mayo, su ejemplo de esfuerzo, de trabajo, de estudio, de entrega por otro, y que vos... sí vos, seas de esos que saben de qué se trata.

EL POTRERITO

Queridos amigos:

Tengo el honor y el agrado de poner en este lugar un texto de mi querido amigo Jorge Hermida. Yo creo que es un crack (después me vas a entender) y que merece que le expresemos el reconocimiento por su sensibilidad y su talento. Gracias por el cuento. y aquí va.




EL POTRERITO

-¡Dale… Dale…! ¡Pasá la pelota de una vez, morfón! …
Siempre era igual, el Colorado se pegaba la pelota a los pies y no la pasaba nunca. Era lógico, era el más habilidoso. Pero no era justo, todos queríamos jugar.
Ese día el partido se puso bravo, los otros eran buenos y pegaban bastante. Pero el Colorado andaba iluminado y a Clemente, nuestro arquero, ese día le aparecieron las manos, porque se atajó todo lo que le tiraron.
-¿Sabés, viejo?... Ese día en el potrerito me cayó la pelota justo en el pie derecho, estaba en el medio de la cancha y con un tipo marcándome de atrás. No sé como hice pero “hamaqué” el cuerpo y me puse de frente al arco y me salió un pelotazo que hizo un globo en el aire y fue a pegar en el ángulo. Bien lejos del arquero, que miraba sin creer que la pelota no se hubiera ido hasta una nube.
Te lo cuento, por que me sorprendió tanto como al arquero contrario; hubiera sido el gol de mi vida… pero no importa fue un zapatazo impresionante y bien al ángulo.
Nunca más me salió, pero que me haya pasado esa vez me hizo sentir que podía hacerlo en cualquier momento. Que no era imposible y que no había que ser un “crack” para lograrlo.

-¿No te parece, viejo?



Jorge Hermida

Bibliotecas digitales para ciencias sociales

En la era digital, la sociología, la filosofía, la antropología y otros ías más no podían faltar en el ciberespacio. Encontré algunos sitios que tienen buenos materiales para lectura y consulta.
Paso las direcciones:
http://www.nombrefalso.com.ar/?opcion=apuntes

http://caosmosis.acracia.net/

http://www.cholonautas.edu.pe/

Son bibliotecas digitales con libros clásicos y artículos de ciencias sociales. Ojalá te resulten útiles.

Darío

Arte cósmico y vida

Amigos:

Quería invitarlos a visitar un blog que abrieron dos artistas que tienen como característica especial que hacen arte entre los dos. Con estilos totalmente diferentes se amalgaman para realizar obras realmente hermosas. Les pido que visiten y compartan a otros lo que hacen esta gente tan querida para mí en http://www.artecosmicoyvida.blogspot.com/

Darío

Contrageografías

Un mapa es una expresión del mundo en que vivimos.

A lo largo de los siglos los mapas se han dibujado para orientar a los viajeros y para ubicar lugares de la tierra.

Pero debemos percatarnos de que un mapa, en especial, los planisferios son proyecciones sobre el plano de un cuerpo esferoide (perdón, geoide). ¿Cómo proyectar una esfera sobre un plano?

Lo cierto es que la historia de los mapas nos muestran la historia de las ideas, los valores y los poderes de quienes los realizaban.

Todos estos mapas describen, no la tierra, sino "su Tierra", la de quienes los diseñan. Todo lo que quedaba fuera de su configuración era terra incognita. Lugares de bárbaros y de monstruos horripilantes.


Así es que América recibe el nombre de un cartógrafo que registra el continente y que hace que el Nuevo Mundo adquiera existencia para Europa (aunque, obvio, ya existía).

Luego vienen mejores mapas con proporciones extrañas pero que por el uso se nos hacen naturales. Así la proyección Mercator suele ser la que tenemos en mente cuando imaginamos la extensión de nuestro mundo. Es notable lo pequeña que se ve Latinoamérica en comparación con otras áreas que en realidad son de extensión reducida, pero más importante que nosotros. Disculpen la ironía.

Si te fijás un poco, podrás observar que el Ecuador está desplazado hacia abajo, lo cual produce una deformación de proporciones y realza las dimensiones en el hemisferio Norte.

Existen otros sistemas de proyección que logran mejor fidelidad o no, según con qué fin se desarrollen

Pero, este es solo un aspecto. Hay otros mapas que se diseñan a partir de otros parámetros. Por ejemplo podemos realizar una nueva configuración de nuestro mundo poniendo centro y atención en las zonas más ricas y poderosas del mundo en donde la mayor cantidad de riquezas se acumula en una minoría de manos.

Esta topografía particular nos habla de nuevas fronteras que se hacen infranqueables para quienes quieren atravesarlas sin ser invitados. Hay nuevos muros que son bien resguardados por fuerzas de seguridad (p. ej. Tijuana o Gibraltar) para que el mundo de la opulencia no sea invadido por quienes reclaman un reparto más justo de las riquezas de nuestro planeta.

La globalización abrió la puerta para la libre circulación de bienes y capitales, pero no quedó abierta para quienes trabajan en la producción de estos bienes.



En distintos sitios de las zonas inhabitadas de los cinco continentes, muros, cercas y vigilancia de frontera con tecnología de punta están siendo construidos con el propósito de dar seguridad a los ciudadanos y presevar sus altos niveles de vida bajo este sistema (Hay un artículo muy interesante publicado por el INTI que habla de esto -para leer el artículo, hacer clic aquí-).

¿Cuál es el mapa que hay en nuestra mente? ¿Cuáles son los límites que nos imponemos cuando miramos al prójimo? Hay quienes han puesto un cerco a su vida cotidiana para alejar sus temores a fuerza de murallas, alambres de púas y guardias armados. Se sienten tranquilos en sus territorios soberanos en los que la pobreza y la fealdad de la necesidad no pueden entrar. Establecen territorios en los que no es necesario dolerse por la pobreza porque está lejos y solo llega a sus casas en las pantallas de LCD cuando miran Policías en Acción. El discurso de los medios nos llama al consumo y al placer personal ignorando al otro, al prójimo (próximo) que tenemos a menos distancia de lo que nos acostumbramos a ver.


Vista aérea de un barrio privado con sus chalets, parques y piletas de natación, separados solo por una pared de un barrio pobre del Gran Buenos Aires

Al abrir nuestros ojos al mundo que nos rodea podemos crear contrageografías que den batalla a los supuestos naturales con los que nos movemos día tras día. Podemos establecer puentes de contacto y acercamiento con los que más necesitan de una palabra de aliento, de un gesto de amor, de nuestro involucramiento personal.

Mientras rogamos que quienes deben hacerse cargo desde el poder de una distribución más equitativa, lo hagan, podemos empezar nosotros. Nuestros mapas pueden ser quizá mapas nocturnos, es decir, tenemos un mapa pero está oscuro y no sabemos por dónde ir. Pero tenemos una linternita para alumbrar aunque sea un pequeño espacio por vez. Pero en la medida que nuestras acciones no sean meramente individuales sino que nos transformemos en una comunidad que alumbra, llegará el momento en que se puede establecer una mirada nueva, inclusiva, con menos barreras ante quienes fueron creados iguales a nosotros por un Dios que no tiene favoritismos con nadie, y que a quien se le acerca, El no lo echa afuera. Por lo tanto, nosotros tampoco.

Un abrazo.
Darío

¡Feliz día Trabajadores!

A todos los trabajadores que visitan este sitio, les deseo un Felíz Día. Y recordar que no es el día del trabajo, sino el Día del Trabajor. No es lo mismo ni es igual.

Darío

Esto no es una pipa

Nuestra vida está rodeada de signos, y como hombres y mujeres modernos nos pasamos la vida leyendo. Leyendo carteles, colores, espacios, instituciones, mapas, sonidos y olores. De esto se compone nuestra realidad.

Cada uno se relaciona de manera diferente con lo que le es externo.

Lo cierto es que el mundo en que vivimos, nuestra sociedad y nuestra cultura, moldea nuestra comprensión de lo que percibimos, sentimos o razonamos. En muchos casos nos perdemos de significados o intenciones que están ahí nomás, a una mirada de distancia. De ahí que siempre es ganancia que aprendamos a ver con nuestros ojos y con los de los demás.

Así lo muestra el "Maestro" Magritte en este cuadro. Claro, no es una pipa, es una representación de la misma. Y además, ¡es sólo una de las muchas maneras de representarla! ¿Por qué quedarnos sólo con lo que ya conocemos, con lo que nos hemos acostumbrado? Nuestra mente se ajusta a reglas aprendidas para vivir en el mundo. Para manejarnos con nuestras familias y nuestros trabajos, para leer el diario o para ver televisión. Pero ¿qué pasa si esas reglas se nos vuelven en contra? Para muestra, solo un ejemplo:



¿No es verdad que muchos nos lo creímos?

Podemos conformamos con ver lo ya visto y de la misma manera en que todos se acercan a los hechos de nuestro mundo. ¿Es todo lo que hay? ¿Hay otras versiones de las cosas? ¿Por qué no mirar desde otro ángulo?
Claro que sí. Hay otra versión del mundo, de lo que se trata es de buscarla.

Este espacio intenta ser muchas miradas, otras miradas de nuestro mundo, para no quedarnos con una sola versión de la vida. Buscar lo que puede ser aprehendido con otros ojos y, si se puede, transformarnos y transformar lo que nos rodea.

Si nuestros ojos se abren más, el cambio es inevitable.